La Ansiedad Social
Entre todos los trastornos de ansiedad que se conocen, probablemente el más incapacitante puede ser la fobia social. Sobre todo, por el amplio abanico de situaciones a las que puede temer la persona que la sufre. Si en la timidez se experimenta cierto malestar cuando nos relacionamos con los demás, en la fobia social estas relaciones tienden a evitarse a toda costa porque pueden llegar a resultar insoportables. La fobia social no produce desagrado, sino que puede provocar un pánico tan intenso que la persona termina recluida en su casa evitando salir, aunque pueda resultarle necesario.
Para identificar cuando una persona sufre Fobia Social, es importante tener en cuenta si está sufriendo síntomas de tres categorías distintas:
Por un lado una hiperactivación física cada vez que tiene que interaccionar con otras personas. Entre los síntomas más destacados esta la sudoración excesiva o hiperhidrosis, los temblores, la sequedad de boca, la aceleración del pulso, sonrojamiento o sensación de mareo y desmayo.
En segundo lugar existen síntomas cognitivos, como estar continuamente preocupado por llegar a ser el centro de atención en una reunión, que nos miren mientras comemos, que nos presenten a alguien o sensación de incompetencia en el momento de hacer cualquier gestión en un comercio. Todos ellos acompañados de una dura actitud autocrítica consigo mismo.
El tercer grupo de síntomas, son los relacionados con el comportamiento o la conducta de quien padece la fobia social. Su comportamiento es un típico comportamiento de evitación, de excusas continuas, de no dormir o comer adecuadamente tres días antes de asistir a una celebración o evento social, si es que puede llegar a asistir durante algún tiempo.
A pesar de lo incapacitante que pueden llegar a ser, este tipo de […]