La atención es el mecanismo que utiliza nuestro cerebro para seleccionar la información de nuestro entorno que es importante o que puede ser, por algún motivo, significativa para nosotros. Muchos de las alteraciones emocionales que padecemos, tienen que ver con una mala elección de la información que procesamos, es decir, con los denominados sesgos o errores atencionales.
Las personas que padecen fobias, prestan atención de forma excesiva a su entorno, tratando de descubrir el objeto temido. Aquellas personas que tienen crisis de ansiedad o son hipocondríacas, centran su atención con demasiada frecuencia en sus sensaciones corporales. Las personas que tienen obsesiones, focalizan su atención desmedidamente en sus pensamientos, ignorando como consecuencia su entorno. Por último las personas con estados de ánimos depresivos tienden a seleccionar de su entorno con mayor frecuencia información de carácter negativo.
Se estima que los cien mil millones de neuronas que componen nuestro cerebro pueden procesar unos cuatrocientos mil millones de bits de información, pero sólo dos mil millones pasaran el filtro de nuestro mecanismo atencional. Sólo seremos conscientes de esos dos mil millones de bits. De ahí la importancia de hacer la elección adecuada, de ignorar la información irrelevante y de quedarnos con aquella que verdaderamente nos ayuda a vivir.
Una buena forma de entrenar nuestra atención, para poder dirigirla a voluntad es la práctica de ejercicios de relajación, en los que al tiempo que relajamos cada grupo muscular, intentamos que nuestra atención se focalice exclusivamente en esta sensación.
En un conocido estudio, gracias al uso de avanzadas técnicas de neuroimagen, se pudo comprobar cómo los meditadores expertos (se les podría llamar quizás concentradores expertos), habían desarrollado el área cerebral encargada de esta función, de forma significativa, por encima de la media de la población. Y lo que es más importante, eran también más felices que la media de la población con la que convivían.
Juan Manuel Gutiérrez
11 de Marzo de 2011.
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